En este caso nos enfrentamos a la fabricación de una sortija de oro blanco con un diamante de 0.2 quilates, unos 4mm de diámetro, y unas pautas exigidas por el cliente:
- El diamante no tiene que ir montado en garras con un diseño moderno.
- Tienen que aparecer dos dibujos emblemáticos.
- En la parte interior del brazo debemos colocar un rubí.
Con estas pautas comenzamos con el diseño y fabricación:
Preparamos un boceto para enseñar al cliente.
Los dibujos rojos son los detalles que queremos colocar.
Tenemos el diamante.
Empezamos fundiendo el metal.
Una vez obtenido el metal y comprobar que está bien fundido, lo estiramos.
Queremos hacer un brazo cuchilla por lo que estiramos el metal hasta obtener un hilo cuadrado de 2.5x2.5mm, lo volteamos y soldamos. Siempre tendremos presente la medida final del anillo. Como ahora el anillo va a recibir muchos golpes, se estirará, teniendo esto en cuenta, el anillo que se muestra a continuación es de una medida mucho menor.
Este es el resultado obtenido después de muchos martillazos, limar y adaptar la boquilla en la que irá el diamante. Aquí ya tiene que estar a la medida.
Tenemos que poner un rubí por dentro del brazo. Lo tenemos en cuenta para dejar el ancho necesario.
Comprobamos que podremos engastar el diamante sin problema.
Y procedemos al engastado, lo pegamos en lacre y cincelamos.
Comprobamos que esté recto.
Una vez engastado el diamante y el rubí interno, pulimos y rodiamos el anillo. El resultado es este:
En las siguientes imágenes se aprecian los detalles a falta del rubí.